César F. Buitrón / León |
El Juvenil B apunta al ascenso con los jugadores llamados a relevar a los de División de Honor.
Los jugadores del Juvenil B que dirige Pablo Carreño sólo han perdido un partido en toda la
temporada y se jugarán el ascenso con el San Andrés y el Cuatrovientos.
El Puente Castro puede presumir de tener el mejor equipo de base de León, el juvenil de División de Honor que tienen en su mano la permanencia, un año más, en la máxima competición nacional. Un milagro para el equipo de la barriada capitalina que no es una casualidad. Detrás del éxito está el trabajo de todo el club. Y el futuro está asegurado. Desde los que empiezan en prebenjamines, el trabajo está encaminado para que los niños lleguen hasta el primer equipo. Los que más cerca están, los del equipo B de categoría juvenil, están demostrando estar preparados para dar el relevo las dos próximas temporadas.
En 23 partidos de liga una sola derrota demuestra claramente que el Puente Castro B que lidera la Primera División Provincial es el vivero que necesita la escuadra de División de Honor. Una sola derrota contra el Cuatrovientos coloca a los arlequinados que dirige Pablo Carreño en una situación perfecta para conseguir otro hito en la historia del club de Puente Castro, ascender a Juvenil Territorial, con lo que sería la primera ocasión en que el club tuviera dos equipos por encima de las ligas provinciales. Un éxito que persigue el club y que se van a jugar con el Cuatrovientos, el único equipo que les ha ganado este año, que está ahora tres puntos por detrás de ellos y con el San Andrés, que está a un solo punto del Puente Castro B y con el que tienen que jugar todavía sus dos partidos.
La buena temporada que está firmando el Puente B tiene aún mayor mérito si se tiene en cuenta que todos sus jugadores son de primer o segundo año en la categoría por lo que se miden a equipos que tienen su base de jugadores de tercer año “que en estas edades se nota mucho porque dos años es mucho. Por eso nuestro estilo de juego es de mucho toque y de mover rápido el balón. Nosotros no podemos entrar en la guerra de ir al choque o de jugar balones largos”, señala el entrenador de los arlequinados, Pablo Carreño, que jugó en Regional de Aficionados [entonces todavía denominada como Regional Preferente] con la Asunción y después de dirigir a equipos de base de La Virgen del Camino y el Pinilla, recaló en el Puente Castro para tratar de ascender al equipo a Juvenil Territorial y que el salto entre los dos equipos juveniles sea menor para los jugadores que están a caballo entre ambas escuadras, como este año son Luis, Corti y Carlos Franco Los tres que más cerca están del equipo de División de Honor en el que casi todos los 21 jugadores del ‘B’ acabarán en la próxima temporada o en la siguiente”.